POCHI, EL PEIXIÑO QUE NECESITABA SABER QUE ES ESO DE UN HOGAR

Hoy es el día de la esperanza, de las cosas que empiezan, de los milagros... Hoy es el día en el que cambia todo y aquel que hizo de un triste cajón su casa comparte una vida en familia... Hoy es el día en el que reina la cordura y se decide terminar con esa semi vida a la que estabas tan acostumbrado... Hoy termina una etapa para empezar otra para ti, Pochi... Hoy hay lágrimas al verte marchar, al pensar que dejarán de verte pero sé que pronto habrá otras lágrimas, las de la alegría por saberte a salvo en un hogar... Porque tú mereces un hogar!!!... Sé que te adoran... Que te han amado desde el primer minuto... Pero no podías seguir esperando un milagro en donde ni Jesucristo pasa a hacer la ronda... Te han cuidado... Te han mantenido a salvo todo este tiempo... Pero ya es hora de tocar otras puertas... Unas puertas que te lleven a alcanzar aquello que toda alma merece: Alguien con quien no sentirse solo... Alguien con quien empezar a caminar sin miedo a nada... Hace años conociste a las que fueron tus ángeles y sé que jamás las vas a olvidar... Cada vez que te de una galleta te diré "Sienta" para que no olvides aquello que te han enseñado... Para que las recuerdes y viendo a tu alrededor des gracias al cielo por haberlas puesto en tu camino... Porque sé que entonces te darás cuenta de que valió la pena y que dejarlas atrás era un paso necesario en el camino hacia esa vida que todos imaginamos para ti... Porque sé que entonces, viéndote a los ojos, se darán cuenta de que era necesario dejarte marchar.Es difícil sentir que hoy es un día alegre, lo sé, ¡las cosas deberían ser más fáciles!... Pero las metas no se alcanzan sentándose en la vera del camino... Cuatro años son demasiados para esperar un sueño... Ha llegado el momento de actuar! ¡Bienvenido Pochi! ¡Bienvenido a Villa Peixiño!